Confianza simple frente a confianza compleja
Antes de configurar un fideicomiso, es importante comprender los diferentes tipos disponibles y las implicaciones de elegir uno.
Los fideicomisos simples y complejos difieren en cómo se distribuyen sus activos. Los fideicomisos simples son más restrictivos sobre lo que se puede y no se puede distribuir, mientras que los fideicomisos complejos son más flexibles.
Comprender los fideicomisos
Un fideicomiso es una entidad legal creada bajo la ley estatal para la administración y distribución de activos a los beneficiarios. El otorgante del fideicomiso crea el fideicomiso y coloca activos en él.
Un fideicomisario, elegido por el otorgante, es responsable de administrar el fideicomiso y eventualmente distribuir sus activos a los beneficiarios elegidos por el otorgante cuando se establece el fideicomiso.
Un beneficiario puede ser cualquier persona que elija el otorgante, pero a menudo es un heredero, un miembro de la familia o una organización benéfica .
Los fideicomisos se pueden utilizar para minimizar los impuestos, simplificar o eliminar el proceso de sucesión y proteger los activos.
Hay muchos tipos diferentes de fideicomisos (revocable, irrevocable, testamentario, de protección de activos, caritativo , para necesidades especiales, derrochador, etc.), pero cuando se trata del estado fiscal, un fideicomiso es un fideicomiso simple o un fideicomiso complejo.
Definición de un fideicomiso simple
Hay tres características básicas que definen un fideicomiso simple:
- El fideicomiso debe distribuir anualmente a los beneficiarios cualquier ingreso que obtenga de los bienes del fideicomiso.
- El fideicomiso no puede distribuir el principal del fideicomiso.
- El fideicomiso no puede hacer distribuciones a organizaciones caritativas.
Cuando se utiliza este tipo de fideicomiso, los ingresos del fideicomiso son ingresos imponibles para los beneficiarios, incluso si no retiran los ingresos del fideicomiso. Los impuestos sobre las ganancias de capital se aplican al fideicomiso mismo.
Definición de un fideicomiso complejo
Un fideicomiso complejo es esencialmente lo opuesto a un fideicomiso simple. Para ser clasificado como un fideicomiso complejo, debe realizar al menos una de tres actividades dentro del año:
- El fideicomiso debe retener parte de sus ingresos y no distribuirlos todos a los beneficiarios.
- El fideicomiso debe distribuir parte o la totalidad del principal a los beneficiarios.
- El fideicomiso debe distribuir algunos fondos a organizaciones caritativas.
Tributación de Fideicomisos
Los fideicomisos se tratan como entidades imponibles separadas, por lo que deben presentar declaraciones de impuestos y pagar impuestos sobre la renta sobre sus ingresos. Los fideicomisos pueden deducir sus gastos y se les permite una pequeña exención de impuestos:
- Un fideicomiso simple puede recibir una exención de $300.
- Un fideicomiso complejo puede aceptar una exención de $100.
Elección de un tipo de tributación fiduciaria
Al configurar su fideicomiso, no asuma automáticamente que desea un fideicomiso simple porque suena más fácil. Un fideicomiso complejo en realidad le brinda más flexibilidad y puede ser una mejor opción, según sus objetivos. También es posible convertir un fideicomiso simple en un fideicomiso complejo y viceversa, si encuentra que sus necesidades cambian.
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